El último estudio conjunto elaborado por INESE y Global Actuarial, que analiza el precio de los Seguros de Vida contratados a través del canal Banca Seguros y otros, como el de Corredurías Profesionales, evidencia una vez más lo lesivo que para el consumidor supone la contratación de este tipo de seguros en las oficinas/sucursales de redes bancarias/cajas.

El hecho de que el mismo riesgo en el estudio comparativo realizado, las operaciones a través del canal bancario resulten un 27,30 % mayor respecto a la contratación directa o con Mediadores Profesionales/Corredurías, se justifica porque el Bancario comercializa a través de su red, normalmente imponiendo el seguro como condición y vinculado a préstamo, sin asesoramiento profesional y sin competencia, donde al cliente, frente a la demanda de un préstamo, el Banco le vende un Pack (préstamo, tarjeta, seguros, etc. etc.), buscando ingresos atípicos aunque cada vez con mayor importancia en la cuenta de explotación de la sucursal, y donde lógicamente la remuneración se pacta con la Aseguradora (normalmente cautiva). Al no haber competencia se repercute a precio el corretaje que se quiera y muy superiores a los estándares de mercado con que los mediadores profesionales trabajan.

Otro hecho diferenciado y a tener en consideración, además del precio, es el Valor Añadido que aportan las Corredurías Especializadas “Profesionalidad, Conocimiento de las Aseguradoras como Proveedores y gama de productos, competencia para adaptar el producto a la demanda del cliente personalizando la oferta en Coberturas, Garantías y Precio”. En definitiva, las Corredurías Especializadas aportan valor, independencia y profesionalidad, lo que no siempre se da en el canal bancaseguro.

Análisis de Don José María Díaz Garcia, Socio-Administrador de Disbrok S.A., basado en una información de INESE