El seguro de coche a todo riesgo es el que más coberturas ofrece en cuanto a seguros de auto se refiere. Aunque siempre hay algún “pero” en el que resulta que todo no está cubierto y/o la cobertura no es al 100 por 100, lo cierto es que este seguro puede resultar más que interesante en ciertos casos, incluso siendo un seguro cuya prima suele ser bastante cuantiosa.
Como sabrás, el seguro de coche a todo riesgo puedes contratarlo con o sin franquicia. Para no extendernos más en este tema, en el artículo Contratar un seguro de coche a todo riesgo con franquicia: Lo que tienes que saber encontrarás mucha información sobre el tema. En cualquier caso, elegirlo con o sin franquicia es algo que tienes que decidir teniendo en cuenta, por una parte, el uso que le des la coche y, por supuesto, tu presupuesto.
Cuándo contratar un seguro de coche a todo riesgo
Los expertos recomiendan contratar un seguro a todo riesgo para coches nuevos y mantenerlo durante dos años. A partir de ese momento es recomendable revisar las coberturas. En la mayoría de los casos no suele salir rentable seguir pagando un seguro a todo riesgo, ya que el valor del coche se ha depreciado mucho y, en la mayoría de los casos, un seguro a tercero ampliado puede ser una opción buena y más económica.
Prácticamente todas las coberturas de los seguros a todo riesgo se pueden contratar en los seguros a terceros, excepto la de daños propios. Pero teniendo en cuenta las limitaciones de esta cobertura y su precio muchos usuarios cambian de seguro.
Sin embargo, en los primeros años de vida del vehículo si suele ser interesante contratar un seguro a todo riesgo. Para muchos esta opción no responde a una necesidad real (al fin y al cabo, es al principio cuando más cuidado tienes con el coche en lo que se refiere a cuidarlo), sino a una cuestión de tranquilidad. En cualquier caso, es la principio cuando realmente vas a recibir una cantidad justa por tu coche de siniestro total, ya que luego se aplican conceptos como el de valor venal y ya no recibes por tu coche lo que te gastaste, sino lo que valía antes del siniestro.
Algunas razones para contratar un seguro a todo riesgo para tu vehículo
Si has comprado un coche nuevo o estás a punto de comprar uno y te estás planteado contratar un seguro a todo riesgo para él, tal vez alguna de estas razones terminen de convencerte.
El seguro a todo riesgo cubre los daños propios, incluso si el siniestro lo has tenido contigo mismo.
Este es el principal motivo que mueve a los conductores a contratar un seguro a todo riesgo para su coche. Tanto si has tenido un accidente con otro (y ha sido culpa tuya) como si en el accidente no ha habido más afectado que tú, el seguro se hará cargo de todo (en los límites de sus coberturas y bajo las condiciones pactadas, esto no puedes olvidarlo nunca). Además, también puedes dar parte de pequeños “siniestros”, como un rayón que le has hecho aparcando o una abolladura consecuencia de un despiste.
En el seguro a todo riesgo puedes incluir todas las coberturas disponibles
Lo que diferencia a un seguro a todo riesgo de uno a terceros ampliados es la cobertura de daños propios. Sin embargo, cuando contratas un seguro a todo riesgo muchas aseguradoras incluyen una amplia gama de coberturas o, al menos, te las ofrecen de forma complementaria. Con el seguro a terceros ampliado se te puede pasar solicitar ciertas coberturas que pueden resultarte interesantes.
Con franquicia y sin franquicia
Puedes elegir el seguro a todo riesgo para tu coche con franquicia y sin franquicia. Aunque si lo eliges con franquicia tendrás que hacerte cargo de la cantidad pactada en todos los siniestros, tendrás la ventaja de disfrutar del seguro más completo por una anualidad menor.
Fuente de la noticia: Punto Seguro