Un estudio en cinco ciudades europeas muestra que las altas temperaturas de los primeros días de julio son cada vez más frecuentes
Las sucesivas olas de calor que afectan a buena parte de Europa durante las últimas semanas pueden o no estar causadas directamente por el cambio climático pero lo que parece seguro es que el calentamiento global inducido por la actividad humana incrementa notablemente el riesgo de que se produzcan intensas y repetitivas olas de calor en amplias zonas de Europa. Así lo recuerda un trabajo de recopilación de estudios científicos que publica esta semana el portal web especializado en comunicación del cambio climático Climate Central.
El artículo publicado en esta web realizada por científicos y periodistas especializados en medio ambiente ha revisado investigaciones y modelos climáticos en los que se comparan los datos históricos con las temperaturas de los últimos años en diversas ciudades europeas. Entre los datos más significativos destaca que en ciudades como De Bilt, en el centro de Holanda, "el análisis de tendencias de los datos de observación muestra que un período de 3 días tan caliente como experimentó durante esta última semana [6-12 de julio] es ahora aproximadamente 7 veces más probable que ocurra lo que era alrededor de 1900". En otras palabras, hace un siglo se podía esperar que Holanda viviera una ola de calor cada 20 años mientras que ahora se esperan episodios de este tipo cada tres años.
Datos sofocantes en Madrid
"En Madrid (estación de Barajas en el Aeropuerto de Madrid), el análisis de tendencias de los datos de observación muestra que un período de 3 días tan caliente como experimentó durante la semana pasada ahora se produce alrededor de 4 veces más a menudo que en torno a 1950. El tiempo de retorno es ahora más o menos de una ola de calor cada 5 años mientras que a mediados del siglo pasado se podía esperar uno de estos episodios cada 20 años", indica esta página especializada en cambio climático.
Utilizando el modelo climático weather@home, los científicos estiman que el cambio climático ha hecho que la aparición de olas de calor en la capital española sea ahora 5 veces más probable que ocurra que hace un siglo. Los autores de este estudio detallan que han utilizado datos de la estación meteorológica del aeropuerto porque los datos de la estación del Retiro podían estar influenciados por la isla de calor de la ciudad (cambios locales de temperatura por la densidad de construcción, tráfico, riego...)
En Mannheim (Alemania), el análisis de tendencias muestra que una ola de calor de tres días como el experimentado la semana pasada "es ahora aproximadamente 8 veces más probable de lo que era en la década de 1930". Antes del cambio climático, en esta zona de Alemania se podía esperar una ola de calor cada 240 años mientras que ahora la población debe estar preparada para uno de estos episodios cada 30 años.
En Beauvais-Tille (unos 80 km al norte de París), el análisis de tendencias de los datos de observación muestra que un período de 3 días tan caliente como experimentado durante la semana pasada es ahora aproximadamente 4 veces más probable que en la década de 1950. Finalmente, en Zurich (Suiza), "el análisis de tendencias muestra que un período de 3 días tan caliente como experimentó durante la semana pasada ahora es aproximadamente 8 veces más probabilidades que fue alrededor de 1900". El tiempo de retorno es ahora aproximadamente cada 13 años, mientras que era más o menos cada 100 años alrededor de 1900, indica este estudio.
Revisión de datos en cinco ciudades europeas
El estudio difundido por Climate Central ha contado con la participación de expertos de la Universidad de Oxford, Instituto de Meteorología de Holanda (KNMI), Centro del clima de Cruz Roja/Media Luna Roja, CNRS (Francia), DWD (Alemania) y MeteoSwiss.
El equipo analizó específicamente los datos de cinco ciudades europeas (De Bilt, Madrid, Mannheim, Beauvais y Zurich en Suiza) tomando como definición de ola de calor la media de las temperaturas máximas más de 3 días consecutivos. Los científicos utilizaron dos métodos independientes en este análisis, lo que permite una evaluación más robusta de un nivel de confianza.
En un procedimiento, se realizó un análisis estadístico de los registros observacionales (utilizando el Explorador KNMI Climático) para comparar el calor de este verano, con veranos durante la primera parte del siglo pasado. Esta revisión descubrió que en las cinco ciudades analizadas, el cambio climático, por lo menos, ha cuadruplicó las posibilidades de que se produzca una ola de calor como la actual. Esto también significa que lo que solía ser muy raros eventos están ocurriendo con mayor frecuencia.
Fuente de la noticia: La Vanguardia