Los seguros para perros suelen catalogarse en función del peso del animal y sus necesidades, os dejamos algunos ejemplos.
Perro de hasta 9 kilos que normalmente está en casa, sale poco y si lo hace es en brazos de su dueño. Para este tipo de animal es recomendable un seguro con cobertura veterinaria que cubra cualquier enfermedad, evitando así cuantiosas facturas.
Perro de entre 9 y 15 kilos, suele salir a la calle pero es tranquilo. Para estos casos además de la cobertura veterinaria es recomendable que el seguro cuente con responsabilidad civil, por muy tranquilo que sea siempre existe la posibilidad de que sin querer empuje a un niño y le cause lesiones.
Perro de entre 9 y 15 kilos o de más de 15 kilos no catalogado como potencialmente peligroso que suele salir a la calle pero es nervioso. Al igual que el caso anterior debemos cubrir la posibilidad de que se produzca un percance o de que el animal contraiga una enfermedad, pero debemos asegurarnos de que la póliza cuente con cobertura por accidente amplia. Este tipo de animales es más propenso a sufrir accidentes que no estarían cubiertos con una simple cobertura veterinaria por enfermedad.
Perro potencialmente peligroso. En estos casos se ha de contratar el seguro obligatorio para perros potencialmente peligrosos. Antes de hacerlo es aconsejable informarse de las exigencias del ayuntamiento o comunidad a la que pertenecemos para escoger el límite de indemnización adecuado y no pagar de más.
Fuente de la noticia: El Blog del Seguro